viernes, 13 de junio de 2008

Bastaaaaaaa

ME TIENEN LAS BOLAS AL PLATO. Así nomás. Sin tanta explicación, sin tanta queja, sin tanto enrosque.
O sea, de verdad siento que no es justo, que no hice nada para merecer que me traten así, que no me avisen las cosas, es como si formara parte de otro grupo. Y hace meses lo vengo "holding" (no me sale la palabra en castellano) y hoy, a 4 días de Bariloche, a 4 días de los que deberían ser los mejores 11 de este año, me hicieron incluso llegar a pensar que si no voy va a dar igual. Obvio que no lo voy a hacer, por diversos motivos, entre ellos la plata o que nunca dejé de ir a un lado por lo que pensaba el resto, pero ese es otro tema.
Y mientras todos (si, TODOS) me están diciendo que debería estar feliz, que tendría que estar más que emocionada (lo estoy, pero no se nota), que me chupe todo 3 kinotos y medio, que no le de bola a nada y me vaya y rompa todo, yo exploto un poquito todos los días (adentro, obvio, porque no quiero generar ningún problema). Me quedo callada la boca porque no tengo ganas de pelear, y me hace peor porque peleo con los que no se lo merecen. Y a esos no puedo explicarles que les grito pensando que son otra persona, no tiene sentido, ni es justo para ellos.
Es UNA la persona, es una sola, siempre fue una sola, todo este año fue una sola, y hasta ahora tuve problemas con todos alrededor MENOS con ella. Que hice? No sé. Cambié? Creo que no. Entonces? NO SÉ.
Y la única que no se lo planteé hasta ahora creo que es la que más podría ayudarme y no se por donde agarrarla, porque de ella (y sólo de ella) si me da algo entre miedo y vergüenza de que cuando empiece a hablar, cada palabra (que era gravísima adentro de mi cabeza) se convierta en una boludez y se vaya cayendo y quede como olvidada, pero el problema persista, y sería otra persona que no puede ayudarme, y no me quedan más. Y además, se sabe, no sé pedir ayuda.
Por todo esto y por bastante más, que no pienso explicar, al menos no por este medio, porque no tendría sentido, me tienen las bolas llenas. Y me enojo y me alejo, y me las llenan más. Y no sé, o no se dan cuenta o les gusta jugar, pero conmigo no se juega.

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